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martes, 2 de enero de 2018

Qualcomm contra el mundo.


Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. (TSMC) fabricará la próxima hornada de procesadores Qualcomm




La noticia del nuevo giro que ha dado Qualcomm, al asociarse con TSMC como fabricante, a sorprendido a unos más que a otros al ser con Samsung quien perdía en este caso, pero realmente el contrato de Qualcomm con Samsung tenia poco de sociedad.
Este es el argumento con el que empiezo a escribir este artículo para intentar explicar con cierta cronología el giro de timón de la empresa estadounidense.
 TSMC. Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. (TSMC) y Samsung han sido archirrivales por mucho tiempo. En el pasado, ambos han estado jugando el juego del gato y el ratón durante algún tiempo en la industria.
Esta es la parte de la tecnología que nos llega, pero remontándonos a finales de 2014 nos encontramos con el gran cambio que movió el mapa de fabricantes de toda Asia.
El culpable y víctima de todo esto es QUALCOMM que se encontró con una avalancha de demandas, juicios y multas por sus practicas con claros indicios de monopolio.





China es el primer origen de los smartphones que se venden en el mundo, y como potencia, decidió que se les estaba cobrando demasiado en concepto de constructor.
La NDRC, siglas en inglés de la comisión ´de desarrollo y reforma` que se ocupa de vigilar el cumplimiento de las leyes chinas contra las prácticas monopólicas, la corrupción y la evasión fiscal, denunció al gigante americano por crear un sistema en el que cobraba a todos por montar sus componentes.  Cargaba dos veces el mismo concepto al fabricante y a la marca.
La querella se cerró con una multa de 975 millones de dólares que Qualcomm pagó de inmediato, por haber abusado de su posición dominante en el mercado de procesadores y chipsets para smartphones.
Qualcomm pagó, sin recurrir, y se dispuso a mantener el tipo de la manera mas digna.
A la vez que pasaba esto en los tribunales, en la parte que se refiere a sus lanzamientos de 2015 nos encontramos que “por arte de birlibirloque” Qualcomm argumenta supuestos problemas con los procesadores Snapdragon 810 que, hasta ese momento, estaban siendo fabricados por TSMC. Hoy por hoy no tengo claro que esos problemas fuesen técnicos.



Entonces Samsung renuncia a utilizar el Snapdragon 810 de Qualcomm en su Galaxy S6, que presentaría un par de semanas después y pasa montar su Exynos de fabricación propia.
La fábrica de origen chino TSMC había fabricado el procesador más potente del momento y su principal destinatario decide romper con él y marcharse a la competencia.




“Sorprendentemente” el 2015 es el peor año de Qualcomm y el mejor año de Mediatek. Qué casualidad. La fábrica Taiwanesa de origen chino es la más beneficiada con la debacle de Qualcomm, que se come los mocos 365 días por culpa de un calentón, de su procesador claro está.



A partir de ese momento Qualcomm llega a un acuerdo con Samsung y, con el fin de recuperar el terreno perdido, lanzan el Snapdragon 820 con casi un año de retraso. El rival de TSMC pasa a ser fabricante del procesador que va a mandar en la gama alta.
Esto provoca un efecto dominó que convierte en clientes de Samsung a todos los clientes de Qualcomm, y las sospechas de monopolio pasan a señalar a los coreanos en vez de a los americanos.



“Con la iglesia hemos topao”

Para colmo de males, Qualcomm también estaba preocupado de que el éxito de los Galaxy reduzca la disponibilidad chips de 14nm que Samsung fabrica en paralelo a su Exynos y deje a Apple sin poder satisfacer la demanda de su propio hardware.



Samsung y Hon Hai Foxconn que también son contratistas de Apple pasan a facturar a favor de Qualcomm al tener que pagar royalties por patentes de los modems, que han de usar los iPhone 7, y son propiedad de los californianos. Esto le provocará un nuevo litigio con una multa de 850 millones que, con idéntico argumento, decidió aplicar la KFTC (equivalente coreano a la FTC) y que Qualcomm ha recurrido.
A lo largo de 2016 Qualcomm diversifica sus inversiones con la adquisición de NXP , siendo esta la más cara en la historia de la industria de semiconductores: 39.000 millones de dólares y revoluciona un mercado ascendente, los chips para automoción: en dos años, Qualcomm habrá pasado del puesto 41º a liderar el ranking del segmento.




Que mejor idea podía tener Qualcomm que adquirir la fabricación de la tecnología de la nueva era. La empresa holandesa NXP tiene como principal atractivo el mercado del automóvil: la empresa holandesa es líder del nicho más dinámico y sostenible para la industria de semiconductores: infotainment, seguridad, ADAS [Advanced Driver Assistance Systems] el emergente coche sin conductor, además del transporte como servicio y la creciente inversión en “El Internet de las Cosas” que giran en torno a la Inteligencia Artificial en los chips. Tanto de los pequeños dispositivos, como puede ser de los chips que monten dichos vehículos.




Si a ello se añaden las competencias de Qualcomm en comunicaciones móviles y chips que serán compatibles con Windows 10, ya tenemos pastel y medio de la fabricación mundial de semiconductores.
Llegamos a 2017 y nos llevamos una nueva sorpresa a modo de leyes de competencias y demás. La larga sombra del manzano de Cuppertino abre otro litigio desde la FTC (Federal Trade Commission) de Estados Unidos, acusando a Qualcomm de prácticas anticompetitivas. Apple le reclama 1.000 millones de dólares.

El nuevo contexto político en Estados Unidos podría dar la vuelta a la posición de la FTC. Ocurre que la presidenta de la Comisión, Edith Ramírez (demócrata), dejará su puesto en breve, y su presunta reemplazante será una comisionada republicana que ha votado en contra de iniciar acciones legales contra Qualcomm porque, dice, favorecería a los enemigos del modelo de propiedad intelectual estadounidense.


Acabamos el 2017 con la cabeza hecha un lío, no sabemos si Qualcomm es la dueña de la fabricación de semiconductores, lo es Samsung o lo será TSMC.
Tampoco sabemos mucho de este no parar de juicios y demandas con el que se financian unas y otras.



 La fabricación del Snapdragon 845 estaría en manos de Samsung, y esto le puede acarrear serios problemas a todos clientes que tengan en mente usar el procesador de Qualcomm. Samsung tiene un acuerdo en el que se reservaría el primer lote de procesadores, de cada evolución, para los Galaxy que presente cada año.
Si hacemos memoria, esto ya pasó con el Samsung Galaxy S8+, y a la salida del buque insignia de los coreanos, todas las demás compañías que deberían haber montado el Snapdragon 835, se vieron obligadas a conformarse con presentar los respectivos rivales del Galaxy, montando el Snapdragon 821.
Viene a tratarse de un canon que debe pagar el fabricante californiano a Samsung en concepto de ventaja, para que los Exynos y los Snapdragon que fabrican, se vendan por delante del resto de sus rivales.

Hartos ya de las condiciones en las que los coreanos trataron las evoluciones de los chips de 14 nanómetros para el Snapdragon 820 y el 821, y que igualmente han hecho con el 835 de 10 nanómetros, Qualcomm ha consentido [posiblemente por contrato] que Samsung mantenga para el próximo Snapdragon 845 los 10 nm, y se reserve ese primer cupo de ventas para sí mismo, siempre dándole preferencia a Exynos en detrimento de los estadounidenses.



Lo que empiezan a contarnos en el último semestre de este año es que Qualcomm ya vuelve a tratar con TCMC y se lanzaran juntos a fabricar el nuevo procesador de 7 nm, que montará el Snapdragon 855.



 "Qualcomm está involucrando a TSMC para lanzar un chip de módem muy pronto en la primera mitad de 2018 y TSMC fabricará el próximo procesador Snapdragon insignia del gigante móvil, conocido como Snapdragon 855, antes del final del próximo año.
Los coreanos perdieron primero el contrato para fabricar el A10 de Apple y ahora también pierden el favor de Qualcomm. Ambos pasan a trabajar con TSMC que tiene casi terminado el desarrollo de fabricación de los chips de 7 nm, gracias a la inversión de 16 billones de dólares en la construcción de factorías capaces de construir los mencionados chips de 7 nm y los siguientes de 5 nm.



Hasta los próximas noticias de riñas y  litigios en los que estén involucrados todos los fabricantes, tendremos que discutir como de potente se nos presenta la generación venidera de chipsets que Qualcomm y TSMC ha prometido para finales de 2018.






Por ahora voy a empezar el año con este artículo, que reconozco me ha quedado largo, pero uno de estos al año no viene tan mal.
Para 2018 voy a ponerme como reto hacer artículos de menos de 500 palabras o por lo menos dividir la noticia en 2 o 3 partes. Como las películas con historias Épicas.
Agradecimientos a todas las fuentes que he consultado para completar de la mejor manera posible lo que os he contado:

Me despido de vosotr@s con los mejores deseos para el año que hemos empezado. Y os invito a visitarnos en nuestras redes sociales:
     
     
     


Articulo original de Miguel Ángel ProSolTek. y también publicado en la web

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